Un matrimonio maduro y sencillo, vecinos de Burgos, deciden realizar su sueño dorado: viajar a Nueva York. Desde los primeros momentos se sienten incómodos; quizás son las altas expectativas, pero al final la añorada ciudad se parece demasiado a lo que han dejado atrás.
Contar como protagonistas con dos cómicos tan solventes como Carmen Machi y Pepón Nieto puede confundir a más de uno que busque una comedia palomitera para pasar el rato. Detrás del guion y como autor de la historia está Juan Cavestany, un cineasta experto en teñir de surrealismo cualquier suceso, por más corriente que sea.
Como en su mejor título, Gente en sitios, o en la serie Vota Juan, Cavestany demuestra su buen “oído” para captar los diálogos de la gente corriente y consigue una atmósfera intrigante que capta al espectador que entre al juego. Pero detrás de la locura de una historia que vuelve a empezar una y otra vez, y al margen de lo interesante que nos pueda parecer romper el espacio y el tiempo en una narración, no hay mucho más. Aunque como pasa con estos experimentos narrativos, habrá quien haga una tesis. Y quizás sea hasta buena.
Ana Sánchez de la Nieta
@AnaSanchezNieta
