Después de Alatriste, Agustín Díaz Yanes (Madrid, 1950) vuelve al cine de actrices que le hizo famoso, realizando una película coral protagonizada por Ariadna Gil, Elena Anaya, Victoria Abril y Pilar López de Ayala. Ellas forman una banda de delincuentes, que tras fracasar al dar un golpe deciden trasladarse a México, donde una de ellas ha contraído matrimonio con un importante narcotraficante.
Díaz Yanes hace gala de un estilo vigoroso y potente, apuntalado por algunas de las interpretaciones y un montaje sin tregua. Pero toda esa fuerza pierde fuelle por una narrativa muy confusa, un guión complejo y varias situaciones inverosímiles. La puesta en escena bebe del thriller contemporáneo americano de estética tarantiniana, con bastante violencia y sordidez sexual.
Es interesante el personaje de Gabriel, interpretado por Diego Luna, columna vertebral del film, y que debido a sus raíces familiares y cristianas, es el único capaz de salir del círculo vicioso de la venganza que atraviesa el argumento de arriba a abajo. Puro cine de género.