El veterano John Frankenheimer dirige un reparto de lujo en este thriller a la vieja usanza. El excelente guión -escrito bajo pseudónimo por David Mamet- no desvela muchas de las claves de la trama, y además emplea como motor de la acción el típico mcguffin -pista falsa- a lo Hitchcock. Sin embargo, mantiene siempre la intriga, la enriquece con las relaciones dramáticas entre los personajes -todos muy bien encarnados- y ofrece varias persecuciones excelentes.
Así, estas andanzas por Francia de un grupo de ex agentes secretos convertidos en mercenarios, que luchan con «los rusos» y «los irlandeses» por una misteriosa maleta, aunque no aporta nada nuevo, resulta un buen entretenimiento; eso sí, de gran violencia.
Jerónimo José Martín