La crisis económica ha devuelto a la actualidad el viejo debate sobre qué papel tiene la tecnología en la creación de empleo. El planteamiento optimista, según el cual inicia una cadena de efectos positivos (salarios más altos, más gasto, más puestos de trabajo para responder a esta demanda), parece haber tenido vigencia hasta finales del siglo pasado. Ahora, hay quien piensa que la “segunda era de las máquinas” traerá consecuencias fundamentalmente negativas, y que perjudicarán sobre todo a los empleos peor pagados.
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Después de que la tecnología sustituyeran a muchos trabajadores en la industria, ha llegado el turno al sector servicios
Otros opinan que, como ha ocurrido…
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