Los negocios al amparo de Internet siguen creciendo. Las entradas de cine, los billetes de avión o las compras por catálogo han dejado paso a servicios más sofisticados y hasta insólitos: desde hace unas semanas una empresa ofrece la posibilidad de completar árboles genealógicos on line, encontrar y contactar con parientes desconocidos, o llegar hasta los padres biológicos por solo cien dólares y una pequeña muestra de saliva.
La compañía americana denominada Ancestry.com ha decidido dar un paso más en su actividad documental. Hasta ahora se dedicaba a recabar documentos históricos y recoger datos de censos y registros civiles de todo un siglo, que exponía en la red para los suscriptores de sus servicios; pero desde hace unos días, los clientes que lo deseen pueden cruzar toda esa documentación con la que se derive de su propio mapa genético y buscar progenitores, posibles hermanos y hasta primos de cuarto o quinto grado con la ayuda de la empresa, según informa The Wall Street Journal.
El avance de la iniciativa se apoya en el perfeccionamiento de la tecnología ligada al estudio del ADN y los mapas genéticos –ya se recogen hasta 700.000 puntos del genoma de cada cliente- y en el uso de las redes sociales, pues una parte de la investigación la hace el propio usuario cuando completa sus datos en un árbol genealógico que construye en Internet. “Todos tenemos un gran interés en entender quiénes somos y de dónde venimos”, asegura el director general de la empresa, Tim Sullivan, que ha sabido sacar partido a esta aspiración.
El servicio, que parece extraído del cine de ciencia ficción, ya tiene una base de diez mil perfiles genéticos que se han ido recogiendo a lo largo de un año de pruebas, y promete atraer más cada día gracias al abaratamiento de los precios. La empresa es la que avisa a cada uno de los clientes de los hallazgos, una vez que se cruzan los datos de los árboles genealógicos con los mapas genéticos. Buena parte de los clientes potenciales son hijos adoptados o personas que buscan averiguar más de su pasado por problemas de salud.
Las principales objeciones al servicio vienen de la confidencialidad que requieren algunos datos o de las situaciones delicadas que pueden ocasionar. También existen dudas sobre el éxito de un negocio así, pues en buena medida la utilidad de la base de datos depende del número de clientes que consigan captar. Pero de momento el proyecto de Ancestry es el más ambicioso de los puestos en marcha a partir del ADN.