Desde hace tiempo, estudios y expertos han señalado la correlación existente entre el consumo de cannabis y la aparición temprana de trastornos psíquicos, como la esquizofrenia. Sin embargo, las conclusiones de estos estudios eran polémicas porque no tenían en cuenta otros factores importantes. Así, por ejemplo, no permitían distinguir la incidencia del cannabis de la del tabaco, ya que es frecuente fumar la marihuana mezclada. Tampoco se examinaba la importancia de la condición sexual o las diferencias de edad y, por ello, había sido criticado su valor empírico.
En un artículo publicado en la revista especializada Archives of General Psychiatry (9-03-2011) con el título de Cannabis use and earlier onset of psicosis, un grupo de investigación, coordinado por personal de la Universidad de Nueva Gales del Sur (Australia) ha realizado la labor de analizar y sintetizar en conjunto los resultados de 83 investigaciones diferentes sobre el tema, involucrando a 22.000 participantes. En este meta-análisis, tal y como se denomina en la práctica científica, los expertos concluyen: “el uso de cannabis desempeña un papel causal en el desarrollo temprano de la psicosis en algunos pacientes”.
En concreto, el estudio sostiene que el consumo de la marihuana adelanta la aparición de desequilibrios mentales en 2,7 años frente a personas no consumidoras. A diferencia de otras investigaciones, en esta se tiene en cuenta el peso de otras sustancias, pero es más bajo que el del cannabis. Entre otras cosas, se descarta que el consumo del alcohol tenga los mismos efectos y tampoco el de tabaco que, según los investigadores, no provoca agravación de la psicosis.
A partir de los estudios empíricos, se puede afirmar que hay “evidencias suficientes” para relacionar el consumo de marihuana y la aparición temprana de enfermedades psicóticas. No se señala, sin embargo, que el hábito de tomar cannabis provoque esquizofrenia, pero alerta de los riesgos que podría tener su consumo en personas con cierta disposición a la enfermedad o lo que denominan “sensibilidad”, aludiendo a la posible existencia de un gen determinado, lo que explicaría por qué la tasas de esquizofrenia se mantienen estables mientras aumenta el consumo de marihuana.
Por otro lado, Time (7 de febrero de 2011) se hace eco de otra investigación en la que se analizaban 190 casos de esquizofrenia, subrayando que de ellos 120 habían consumido marihuana. Un subgrupo de 44 pacientes, además, o había desarrollado los primeros síntomas psicóticos dentro del primer mes de consumo o éste había causado una significativa agravación de la sintomatología.
Según Archives of General Psychiatry, los resultados que se presentan exigen replantear ciertas políticas sanitarias, teniendo en cuenta que según la encuesta nacional sobre el consumo de drogas de 2009, en EEUU más de 16 millones de personas consumen regularmente cannabis y que la mayoría de ellas comienzan a hacerlo en el periodo de la adolescencia.