La insatisfacción siempre se ha considerado un valor positivo en la juventud, pues se la suponía unida a la rebeldía y al inconformismo. El panorama que nos presenta el estudio quinquenal de la Fundación SM (Jóvenes españoles 2010) es muy distinto: los españoles entre 14 y 24 años son pesimistas, apáticos y desconfiados, al menos en sus opiniones. Con todo, la sospecha hacia cualquier tipo de organización pública ha acrecentado en ellos la confianza en la familia.
El estudio de SM recoge los resultados de encuestas personales realizadas a cerca de 4.000 jóvenes. En ellas se les pregunta por sus valoraciones, intenciones, filias y fobias; de ahí que el informe suponga una radiografía de la percepción del mundo por parte de los jóvenes, y no…
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