La OTAN ha aprobado en Lisboa su nuevo concepto estratégico, en el que no se señala a ningún país como enemigo, pero sí se identifican las amenazas y retos que tiene que afrontar la Alianza.
Al término de una conferencia pronunciada en Madrid el pasado septiembre, Anders Fogh Rasmussen, secretario general de la OTAN, utilizaba una expresión coloquial: “Esta no es la OTAN de los tiempos de tu papá”. Efectivamente, han pasado dos décadas desde el final de la guerra fría, lo que ha llevado a la Alianza a añadir a su tradicional función de defensa colectiva, las de gestión de crisis y de seguridad cooperativa.
Todas ellas aparecen en los tres conceptos estratégicos adoptados por la organización a lo largo de este período, incluido el de la cumb…
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