Uno de los temas candentes de este verano en Estados Unidos ha sido el debate en torno a la Decimocuarta Enmienda de la Constitución, en la que se recoge que “Toda persona nacida o naturalizada en los Estados Unidos, y sujeta por ello a tal jurisdicción, es ciudadana de los Estados Unidos y del Estado en que resida”. Este texto, ideado en su origen -al término de la Guerra Civil americana- para reconocer la ciudadanía de los esclavos, ha facilitado también desde entonces la ciudadanía automática a los niños nacidos en suelo americano de inmigrantes ilegales.
Alrededor de 340.000 de los 4,3 millones de bebés que nacieron en Estados Unidos en 2008 (8%), tenían al menos un progenitor con estatus de ilegalidad, según un estudio publicado por el…
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