El informe de la Comisión Stiglitz hace una serie de recomendaciones para establecer nuevos indicadores del progreso económico y social. Un leitmotiv del informe es que la medición ponga mayor énfasis en el bienestar de la gente que en la producción económica. Esto exigiría desarrollar un sistema estadístico en el que la actividad del mercado se complemente con medidas centradas en el bienestar de las personas y en la sostenibilidad, es decir, en la posibilidad de que los recursos que utilizamos no mengüen los de las generaciones futuras.
Evidentemente, estos indicadores no son tan sencillos y categóricos como el PIB, sino que exigen un abanico de diferentes medidas.
También es preciso pasar de un enfoque puramente cuantitativo a otro en e…
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