Investigar la homosexualidad es arriesgado

La homosexualidad puede ser terreno peligroso para un investigador, como ha podido comprobar el psicólogo norteamericano Michael Bailey, profesor de la Northwestern University. Una prolongada campaña contra un libro suyo que no gustó a parte del movimiento gay le ha tenido en la picota durante cuatro años bajo acusaciones, no probadas, de faltas contra la ética. La obra que ha causado tanta polémica es The Man Who Would Be Queen (“El hombre que quería ser reina”, en imitación del famoso título de Rudyard Kipling), pensado para explicar al público en general la base biológica de la homosexualidad. En la tercera parte, la que ha causado mayor furor, Bailey examina el caso de los transexuales que pasan de hombre a mujer. Según él, los varones …