Amsterdam. Una foto en color, gran primer plano de una madre de Níger con su hijo del que sólo se aprecia la mano en un centro de emergencia en Tahoua, ha sido galardonada con el World Press Photo de 2005 en Amsterdam. La imagen fue tomada el 1 de agosto de 2005 por el fotógrafo canadiense Finnbarr OReilly para la Agencia Reuters. Ni el drama de Cachemira, ni Irak, ni los desastres causados por el Katrina en Misisipi y Luisiana han ganado el premio, sino un drama personal anónimo con el telón de fondo del hambre.
El concurso admite 10 categorías tanto en reportaje como en imagen individual: «Spot news» (acontecimiento imprevisto), «General news» (noticias en general), Gente en las noticias, Facetas del Deporte, Deporte en Acción, Temas actuales, Vida cotidiana, Retratos, Arte y Espectáculos, y Naturaleza. Un jurado independiente, formado por 14 miembros, premia en modalidad imagen y reportaje imágenes de las 10 categorías, de las que es seleccionada la foto del año.
La presentación del premio en Amsterdam no ha provocado una reacción de entusiasmo. La foto era un segundo premio en la categoría de Gente en las noticias. No es tan obvia y de lectura fácil como las de otros años. James Colton, director de imagen de «Sports Illustrated» y presidente del jurado este año, se esfuerza por explicar que es una foto de gran excelencia periodística y que transmite paz y esperanza.
Este año compitieron 4.448 profesionales de 122 países con total de 83.044 imágenes. El concurso WPPH sigue cada año batiendo su propio record: 182 fotógrafos más que en 2005 y un 4% más de imágenes.
Ricardo Mazalan, fotógrafo argentino, residente en Colombia, director de imagen para Latinoamérica de Associated Press, miembro del jurado, quiere dejar clara la idea que el concurso no es sólo para grandes estrellas del fotoperiodismo. «Todas las imágenes son tratadas con el mismo respeto y atención». Mazalan habla ahora no como miembro del jurado, sino como fotógrafo. «En las tres primeras categorías se puede ver que hay que tener un buen contrato y plata para poder optar a premio. No puedes fotografiar los desastres causados por el huracán Katrina sin un helicóptero, pero no es necesario estar en los principales eventos del mundo. Hay trabajo y categorías para todos los fotorreporteros. Yo les animaría a participar». El hecho de que Finnbarr OReilly, autor de la foto premiada, lleve sólo un año de fotorreportero confirma la verdad de las afirmaciones de Mazalan.
El primer premio en hacerse público por orden de aparición en la rueda de prensa fue el otorgado a Daniel Beltrá, español que trabaja para Greenpeace. Su reportaje sobre la sequía en el Amazonas, con fotos en panorámica tomadas desde un avión, demuestra de un modo sobrecogedor el impacto de la falta de agua. El siguiente premio a un español ha correspondido a Benito Pajares de «El Mundo», en la categoría de Deportes en Acción, con un reportaje sobre maratón en el Sahara, lleno de humor y de arena que hasta se masca al mirarlo.
Más humor aún había en la imagen de la viejecita doblada por los años que contempla el sillón en forma de labio de Dalí en la exposición de Filadelfia, tomada por Michael Wirtz.
Abundan entre los premios fotos de después del tsunami, ya que este tuvo lugar en 2004, cuatro días antes de que se cerrara el concurso de hace dos años, lo suficiente sin embargo para que el tema fuese el premio del año. Otros ejemplos de impacto son las fotografías de Cachemira, explosiones de bombas en Irak y Beirut, pero más crueldad aún encierra el reportaje del argentino Rodrigo Abd, de un grupo de pandilleros en Guatemala. Un gran profesional demuestra ser Paolo Pellegrin, italiano que trabaja para Magnum. Dos series suyas han sido premiadas: retratos de gente rezando la noche antes de morir Juan Pablo II en la Plaza de San Pedro y un reportaje de «Fashion Week» en Nueva York, ambos en blanco y negro.
Las sesenta fotos premiadas en la 49 edición del concurso World Press Photo han sido como siempre juzgadas no sólo por su valor como noticia, sino también por su percepción creativa. Y como si fueran la memoria colectiva del año 2005, recorrerán 85 ciudades de los cinco continentes en una exposición itinerante. La inauguración tendrá lugar en Amsterdam el lunes 24 de abril con la entrega de los premios a los fotógrafos galardonados.
Carmen Montón