Cinco años después de la caída del comunismo en Europa central, el presidente de la Conferencia Episcopal húngara, Mons. István Seregély, ha hecho un balance optimista sobre la Iglesia de su país, en declaraciones a Ayuda a la Iglesia Necesitada.
Mons. Seregély, arzobispo de Eger, considera positivos los logros de estos años: "Ya no tenemos que mendigar permisos para impartir enseñanza religiosa, ni para reunirnos ni para celebrar actos litúrgicos fuera de la iglesia, ni para construir, etc. Además, se nos ha restituido gran parte de las propiedades de la Iglesia gracias a un acuerdo firmado en 1990, que fijó un plazo de diez años para llevar a término este proceso. Un dato muy positivo es que el deseo espontáneo de trabajar con la …
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