– ¿Qué cambios ha supuesto la baja de natalidad en el sistema escolar?
En la enseñanza primaria, la falta de natalidad ha hecho que en los últimos diez años (desde el curso 1986-87 al 1995-96) los alumnos hayan descendido un 22% en los centros públicos y un 28% en los privados. En cambio, a pesar del declive demográfico, la prolongación general de los estudios ha hecho que aumente el número de alumnos en los niveles postobligatorios (BUP, FP). En esos diez cursos, los alumnos de enseñanza secundaria general han aumentado un 51% en los centros públicos y un 1,2% en los privados; en Formación Profesional, en la enseñanza pública han crecido un 18,8% y en la privada han bajado un 14,2%. En suma, en los niveles donde la matrículación de alumnos aumenta, crece más en la pública; y en los que baja, baja más en la privada.
Como consecuencia de la drástica baja de natalidad, desde hace años se vienen cerrando aulas en la pública y en la privada. El gobierno socialista cerró 804 aulas en la enseñanza pública en el curso 1996-97; el gobierno actual cerrará 611 el próximo curso. En cambio, se siguen construyendo institutos en zonas donde, por los movimientos de población, hay un déficit de puestos escolares.
Igualmente, en la enseñanza privada, a la vez que se cierran aulas, se establecen nuevos conciertos con centros que sí tienen alumnos. El gobierno socialista concertó 221 nuevas aulas en el curso 1994-95; 138 en el curso 1995-96; 43 más en el 1996-97. Los nuevos conciertos anunciados por el actual gobierno con 34 colegios suponen 178 aulas más.
– ¿Se detraen alumnos de la enseñanza pública en beneficio de la privada?
Desde principios de los años 80 ha aumentado el peso del sector público en la oferta educativa. Esta mayor presencia pública crece conforme se elevan los niveles educativos. Desde que empezó a aplicarse la LODE, los alumnos escolarizados en centros públicos han pasado del 62,4% del total en el curso 1982-83 al 69,1% en el curso 1995-96. En la enseñanza primaria, la proporción de alumnos de la enseñanza pública ha subido al 65% y en las enseñanzas medias al 73%.
– ¿Están peor atendidos los alumnos en la enseñanza pública?
Aunque desde hace años el número total de alumnos primero se estanca y luego desciende, el número de profesores ha crecido ininterrumpidamente en la enseñanza pública. En consecuencia, el número medio de alumnos por profesor ha descendido en todos los niveles. En los últimos cuatro cursos la ratio ha ido bajando en ambos sectores, pero la proporción es favorable para la enseñanza pública.
En el curso 1995/96, la proporción en enseñanza primaria era de 16,6 alumnos por profesor en la pública y de 21 en la privada; en secundaria, 13,5 en la pública y 15,8 en la privada.
Mayor coste del puesto escolar público
– ¿La enseñanza privada tiene más recursos que la pública para dar una enseñanza de calidad?
El dato más significativo a este respecto es el coste del puesto escolar. Según el informe que acaba de publicar la Fundación Argentaria, Las cuentas de la educación en España y sus comunidades autónomas: 1980-1992, en conjunto, este coste es del orden de un 30% mayor en la enseñanza pública que en la privada. La diferencia más acusada se da en las enseñanzas medias, donde el coste de la enseñanza pública supera en más de un 50% al coste de la enseñanza privada.
La principal explicación de la diferencia está en los costes de personal de la pública, cuyos profesores están mejor pagados. También los gastos de inversión son más elevados en el sector público. En cambio, los otros gastos de funcionamiento son mayores en los centros privados, algo que a veces se percibe en las condiciones en que funcionan los centros (ver cuadro).
– ¿Se desvían fondos de la enseñanza pública a la enseñanza privada?
La Orden de conciertos educativos adoptada por el actual gobierno no supone un trasvase de recursos de los centros públicos a los concertados. Se trata de una financiación independiente con cargo al capítulo de subvenciones de los Presupuestos aprobados en las Cortes. Los Presupuestos actuales prevén la atención a los compromisos que ya contrajo el gobierno socialista para atender la enseñanza concertada, que es un modo de hacer efectivo el derecho a la educación y a la libertad de enseñanza, garantizado por la Constitución. Del total del gasto educativo (unos 900.000 millones de ptas.), a los colegios concertados se destinaron 117.000 millones, es decir, un 12%. El aumento de un 4% en la partida dedicada a conciertos se debe a la implantación del primer curso de la ESO, más cara que la antigua EGB. En cambio, el módulo (el importe de la subvención pública por aula) está congelado, a pesar de que la privada se queja de que no cubre el coste real de la enseñanza. El déficit, según declaran las distintas patronales de la enseñanza, oscila entre 500.000 y 700.000 pesetas por aula al año.
No hay que olvidar tampoco que, en los conciertos con centros privados, lo normal es que se subvencione con fondos públicos exclusivamente la enseñanza obligatoria. Sólo en algunas comunidades autónomas, como Galicia y Navarra, se ha empezado a subvencionar también tramos no obligatorios. En cambio, en la enseñanza estatal son gratuitos todos los niveles, también la enseñanza preescolar y la secundaria no obligatoria.
ACEPRENSA