Contrapunto
«Jane Fonda inicia una cruzada para salvar el planeta», asegura el titular de la noticia (El País, 23-IX-93). Luego resulta que lo que ha iniciado es una carrera de propagandista del control de natalidad por cuenta del Fondo de las Naciones Unidas para la Población. Acompañada de su marido, Ted Turner, el magnate de la televisión CNN, la actriz pronunció un discurso durante una reunión del Fondo, en el que criticó a la Iglesia católica por oponerse a los métodos anticonceptivos. «Intereses poderosos -incluida la Iglesia católica- quieren que ignoremos los métodos anticonceptivos como una parte necesaria de la planificación familiar», lo cual según la actriz constituye una amenaza contra el futuro de la Tierra.
Como de costumbre, los poderosos se curan en salud disfrazándose de débiles. Pero si el problema es de intereses materiales, los más interesados en este asunto deben de ser los laboratorios farmacéuticos que venden los anticonceptivos y no la Iglesia católica que no gana un dólar por oponerse a ellos. Y si de poderosos se trata, el Fondo de Población de la ONU es uno de los más fuertes grupos de presión en favor del control de la natalidad, y la CNN puede servirle de potente altavoz mundial. Ni la Iglesia católica puede actuar como los organismos financieros internacionales que condicionan sus préstamos a la imposición de programas de control de la natalidad en países en desarrollo.
Tampoco acostumbra la Iglesia católica a recurrir a una tergiversación como la que utilizó Jane Fonda, que acusó a la Iglesia de resistirse a aceptar la realidad al decir que «hasta el año pasado no admitió que Galileo estaba en lo cierto» (la información añade «sobre su teoría de que la Tierra es redonda», pero esto no es textual y quizá no sea cosecha de Jane Fonda sino fruto de la ignorancia del redactor). La realidad es que al cabo de 350 años de la muerte del sabio italiano todavía no se ha conseguido que algunos se enteren de qué se ventilaba en el caso Galileo. En fin, Jane Fonda prestaba una mejor contribución al futuro de la Tierra con su cruzada comercial de los métodos para mantenerse en forma. En el aerobic mental no tiene mucho que aportar.
Juan Domínguez