Tras pasar una noche en un hotel en el kilómetro 1.459 de la autopista de Kolimá, el periodista polaco Jacek Hugo-Bader reemprende su viaje, esta vez con Yuri, un camionero que trabaja en una empresa de transporte de la zona, que se ha ofrecido a llevarlo. Con él recorre en diez horas unos 450 kilómetros hasta llegar a un lugar que llaman Arroyo del Chamán, cerca de donde tienen pensado cruzar el peligroso y helado río Aldán. Allí detienen el camión, comen, preparan un té y abren una botella de vodka para la ocasión.
Después, escribe el periodista: “Una velada mágica más. Las adoro. Por ellas recorro el mundo y ejerzo el oficio de reportero. Me encanta charlar con los popútchiks, la gente con la que me encuentro en el camino. Hay que ver de…
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