Palabra. Madrid (2004). 190 págs. 10 €.
María, una joven brasileña de origen cubano, pasea con su perro por el madrileño Parque del Retiro. Un encuentro casual con Gregorio, que hace footing con la compañía de un pastor alemán, provoca una pelea de resultados mortales para el perro de María. A raíz de este suceso María y Gregorio descubren que habían convivido cuando apenas eran unos niños en Cuba. Ahora, muchos años después, las cosas han cambiado para los dos. María abandonó Cuba y trabaja como médico en la Embajada de Brasil. Gregorio es electricista y vigilante en un centro escolar y también estudia informática. Tanto María como Gregorio recuerdan episodios de su vida pasada e intentan buscar una solución para el padre de ella, prisionero en las cárceles de Fidel Castro. Esta acción, bastante realista y con sus dosis de romanticismo, se alterna con el relato de la vida de unos habitantes muy singulares del Retiro, los árboles y las estatuas, que cobran vida y que tienen en la novela un simpático y original protagonismo.
El argumento alterna episodios reales y fantásticos dentro de una trama verosímil, donde tiene un papel importante la estatua del ángel caído, dedicada el demonio. El autor ha escrito una novela que se lee de un tirón, con un argumento que avanza a golpe de sorpresas, con escenas muy divertidas.
Ángel Amador
