Javier Vergara Editor. Buenos Aires (1995). 421 págs. 2.700 ptas.
El norteamericano Greg King narra de manera pormenorizada el singular destino de Alejandra Feodorovna, de soltera Alix de Hesse, última emperatriz de Rusia. Con minuciosidad y gran penetración psicológica, el autor pasea su mirada por la atormentada existencia de la protagonista, despreciada por las masas rusas y calumniada y malinterpretada por los historiadores.
De origen alemán y emparentada con la realeza europea, Alix de Hesse contrajo matrimonio en 1894 con el débil Nicolás, más tarde zar Nicolás II, después de vivir los esplendores de la corte inglesa en su apogeo victoriano. Por medio de anécdotas no exentas de fino humorismo, se describe su vida suntuosa, en un ambiente perturbado por sucesivas revoluciones, motivadas en parte por una política autocrática y absolutista, que volvía la espalda a las realidades más evidentes. En algunos pasajes escabrosos se refleja la pasmosa personalidad de Rasputín, monje iletrado de origen campesino y considerado el salvador de Alexei, hijo de la emperatriz y enfermo de hemofilia.
La entrada de Rusia en la I Guerra Mundial desencadenó la revolución de 1917, que obligó al zar a abdicar, para ser posteriormente recluido con su familia hasta el trágico final de todos.
Las vicisitudes de la zarina, sus relaciones humanas marcadas por su timidez e introversión -que provocaron tantas incomprensiones por parte del pueblo-, las épocas más felices y los momentos muy duros, así como su costumbre de interferir en los asuntos de gobierno, se describen de forma rigurosa y documentada. En la obra se incluyen citas de diarios personales, cartas e informes contemporáneos, así como los descubrimientos más recientes relacionados con la vida de la emperatriz.
La novela agradará sobre todo a los lectores aficionados a los temas históricos, pero también a todos aquellos interesados en asomarse a uno de los acontecimientos capitales de la historia del siglo XX, desde una perspectiva llena de interés humano.
Begoña Mardones