Mondadori. Barcelona (1999). 338 págs. 3.200 ptas.
Reedición de las memorias de Margaret Fountaine (1862-1940), aristócrata inglesa y afamada entomóloga, que decidió gastar su herencia en unos viajes que la llevarían por el mundo entero. A su muerte se encontraron dos legados: una colección de más de veinte mil ejemplares de mariposas, que donaba al museo de Norwich (Inglaterra), y un cofre sellado con los manuscritos de su diario.
El libro selecciona los mejores momentos de la vida de su autora. Sin pretenderlo, ésta realizó un magnífico autorretrato de una dama excéntrica y de fuerte personalidad, incapaz de acomodarse a los rígidos y estereotipados moldes de conducta que imperaban en la sociedad victoriana. La narración entrelaza adecuadamente la primera voz del diario, el intercambio epistolar y algunos comentarios hechos por el propio seleccionador de los textos, que abrevian la situación y facilitan la lectura.
El diario tiene un estilo romántico, cuidado y elegante, de asombrosa sensibilidad para las descripciones naturalistas y psicológicas. De modo que logra atrapar al lector en un interés progresivo y proporciona una amena lectura.
Juan Domínguez