Alemania se enfrenta en la actualidad a importantes desafíos. Su economía ha entrado en recesión. Los precios de la energía y la inflación están por las nubes. Las políticas ecológicas del Gobierno no hacen mucho por mejorarlos. Tampoco el abandono progresivo de la energía nuclear. El debate sobre la inmigración también está a la orden del día. Y luego tenemos al partido de extrema derecha Alternative für Deutschland (AfD), que está viviendo una popularidad sin precedentes.
El presidente alemán Frank-Walter Steinmeier habló este agosto alto y claro. En el 75 aniversario de la Convención de Herrenchiemsee, en la que se acordó el primer borrador de la Constitución alemana actual, Steinmeier advirtió de que los enemigos de la democracia muy pr…
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Un comentario
Comprendo que los otros partidos criminalicen e intenten restarle legitimidad democrática… pura estrategia política. Pero no entiendo que usted, como autora defina al partido como de extrema derecha. Me parece que sus planteamientos de centrar el debate en temas que preocupan al ciudadano medio como la crisis migratoria y el consiguiente incremento de la seguridad, o la nefasta política energética de Alemania en los últimos quince años, con el cierre de nucleares y el precio más alto de Europa, son muy atinados.
!Que estamos en Aceprensa; no en el NY Times!!