Cinco regiones italianas han creado ya diversas fórmulas de bonos escolares para facilitar que las familias puedan elegir entre los centros estatales y los privados equiparados. Se empiezan así a poner en práctica las ayudas previstas en la ley aprobada en 2000, que por primera vez permitía utilizar fondos públicos para financiar a estudiantes de las escuelas privadas (cfr. servicio 37/00). Los bonos están todavía lejos de cubrir el coste real en los centros privados, pero son significativos porque rompen el tabú de la financiación pública de la escuela no estatal.
La ley aprobada en 2000 después de muchas polémicas, prevé la posibilidad de ayudas, según los niveles de renta familiar, para desembolsos efectuados tanto en centros púb…
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