Según el estudio «Demand for Same-Sex Marriage: Evidence from the United States, Canada and Europe», publicado por el Institute for Marriage and Public Policy (Virginia), en los países donde se han aprobado leyes de matrimonio entre personas del mismo sexo, sólo un pequeño porcentaje de homosexuales decide casarse. La agencia Zenit (1 julio 2006) se hace eco de este estudio.
La estimación más alta en el mundo en cuanto a la proporción de parejas homosexuales que han decidido casarse se da en el estado norteamericano de Massachusetts. En 2004, año en que se aprobó allí el matrimonio entre personas del mismo sexo, se casaron 5.994 parejas. Los últimos datos oficiales indican que, al año siguiente, la cifra de enlaces entre homosexuales descendió a 1.347. Según el estudio, no existen estimaciones fiables de la población homosexual de Massachusetts. Pero si se asume que la proporción es la misma que la media nacional (el 2,3% de los hombres y el 1,3% de las mujeres), y que todos los matrimonios se celebraron entre residentes del estado, se concluye que sólo el 16,7% del total de los homosexuales de Massachusetts se ha casado con otra persona del mismo sexo.
En abril de 2001, Holanda se convirtió en el primer país que legalizó el matrimonio entre homosexuales. Desde entonces y hasta finales de 2005, se han celebrado en ese país 8.127 «bodas gay». Según las estimaciones oficiales, el 2,8% de los holandeses y el 1,4% de las holandesas son homosexuales. Si se entiende que todas las parejas del mismo sexo que se han casado en Holanda son residentes, el porcentaje total de homosexuales que se han casado allí sería de 6,3%. Este porcentaje -al igual que los demás que recoge el estudio- incluye a todos los que alguna vez se han casado, y que no tienen por qué estar casados en la actualidad.
El segundo país que aprobó, en junio de 2003, una ley de matrimonio entre homosexuales fue Bélgica. Durante el resto de aquel año se casaron 1.708 parejas del mismo sexo. A finales de 2004 esta cifra aumentó hasta las 2.204 parejas. Los autores del estudio no han encontrado estimaciones oficiales del número de homosexuales en Bélgica. Si hubiera el mismo porcentaje que en Holanda, sólo el 4,7% de los homosexuales belgas habría decidido casarse.
En Canadá, el Tribunal de Apelación de Ontario preparó el camino para la aprobación del matrimonios entre personas del mismo sexo en junio de 2003, pero no se legalizó en todo el territorio nacional hasta el verano pasado. La nueva ley permite casarse a las parejas homosexuales, aunque ninguna de las partes resida en Canadá. Tras estudiar los datos de la prensa y las estadísticas oficiales, los autores del estudio concluyen que muchas de las «bodas gay» que se han celebrado en ese país tuvieron lugar entre parejas no canadienses, la mayoría de Estados Unidos.
En 2003, la Canadian Community Health Survey -una encuesta anual llevada a cabo por Statistics Canada- preguntó por primera vez sobre la orientación sexual de la población canadiense. Según la encuesta, el 1,3% de los hombres y el 0,7% de las mujeres entre 18 y 59 años se identifican a sí mismos como homosexuales. De las siete provincias canadienses donde ha habido matrimonios del mismo sexo durante al menos un año, sólo se han casado entre el 0,15% y el 14% de los homosexuales que podían hacerlo.
El estudio muestra también que, desde que se aprueba en un país una ley de matrimonio entre homosexuales, el número de bodas celebradas entre personas del mismo sexo desciende a marchas forzadas. El caso de Holanda es paradigmático. En 2001, de abril a diciembre, se casaron 2.414 parejas homosexuales. En 2002, la cifra de nuevos matrimonios del mismo sexo descendió hasta los 1.838; en 2003, a 1.499; en 2004, a 1.210; y en 2005, a 1.166.
Los datos contenidos en «Demand for Same-Sex Marriage: Evidence from the United States, Canada and Europe» se han visto confirmados por estudios realizados en otros países. Como explica Stanley Kurtz en «National Review Online» (5 junio 2006), las estadísticas del norte de Europa confirman la tendencia en el número de uniones del mismo sexo. Kurtz basa su información en un estudio realizado por dos demógrafos escandinavos, Gunnar Andersson y Turid Noack: «La demografía de los matrimonios del mismo sexo en Noruega y Suecia». En Noruega, desde 1993 hasta 2001, sólo se contrajeron 1.293 matrimonios entre personas del mismo sexo (frente a los 196.000 matrimonios heterosexuales). Y en Suecia se registraron 1.526 uniones del mismo sexo entre 1995 y 2002, en comparación con los 280.000 matrimonios.
Para referirse al caso de España, la agencia Zenit recurre a los datos provisionales del Movimiento Natural de la Población, publicados recientemente por el Instituto Nacional de Estadística. Según estos datos, desde la entrada en vigor de la ley de matrimonio entre personas del mismo sexo, en julio del año pasado, y el 31 de mayo de 2006, se han celebrado 1.275 «bodas gay». Esta cifra suma un mero 0,6% de los 209.125 matrimonios contraídos en España durante 2005. De la suma total de matrimonios del mismo sexo, 923 fueron entre hombres y 352 entre mujeres.