Breves notas sobre algunas películas que se estrenan el 30 de septiembre.
Cigüeñas
Storks
Directores: Doug Sweetland, Nicholas Stoller. Guion: Nicholas Stoller. Animación. Voces en el original: Andy Samberg, Katie Crown, Kelsey Grammer, Jennifer Aniston, Ty Burrell, Anton Starkman, Keegan-Michael Key, Jordan Peele. 89 min. Todos.
Cigüeñas comienza recordando que estas aves se han encargado de llevar los bebés a sus hogares. Ahora, las cigüeñas se dedican al transporte de mercancías para una fabulosa empresa de mensajería.
Cigüeñas tiene buena factura, pero le falta guion. Las ideas de partida son excelentes, pero luego la cinta recurre a lugares comunes; no se ha sabido producir material original para un largometraje, aunque hay buenos gags visuales y algunas escenas hilarantes. Por lo demás, aunque la película muestra familias de todo tipo, no oculta su preferencia por las numerosas y arremete contra los padres que están trabajando todo el tiempo y dedican poca atención a sus hijos. Las imágenes de preciosos bebés riendo son siempre eficaces y harán las delicias de los pequeños, y de sus acompañantes. Fernando Gil-Delgado.
Elle
Director: Paul Verhoeven. Guion: David Birke (novela: Philippe Djian). Intérpretes: Isabelle Huppert, Laurent Lafitte, Anne Consigny, Charles Berling, Virginie Efira, Lucas Prisor. 130 min. Adultos. (VXD)
Una mujer madura, alta directiva de una empresa de videojuegos, es violada en su casa. Cuando descubre al posible agresor, inicia una obsesiva y extraña persecución.
El holandés Paul Verhoeven es un cineasta obsesionado con el morbo, especialmente el que puede rodear a la conducta sexual. Hasta aquí nada nuevo. Lo que no deja de resultar sorprendente es el incienso de la crítica a una película que es, exclusivamente, un ejercicio de estilo atmosférico con una narrativa bastante vacua y previsible (la “explicación” de la infancia traumática es de TV movie) cuando no inverosímil, además de ofensiva (la frivolización de la violación siempre lo es, sea cual sea el género cinematográfico).
Dicen que Huppert está muy bien. Es una magnífica actriz, pero la falta de empatía –buscada, es verdad– es total. En su descargo hay que decir que no ayuda interpretar a un personaje absolutamente increíble, enfermo y enfermizo… Ana Sánchez de la Nieta.