El impulso a los cuidados paliativos y la posibilidad de que los cuidadores de un enfermo terminal disfruten de una baja laboral son algunas de las recomendaciones que la Organización Médica Colegial y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos hacen al anunciado proyecto de ley de “muerte digna” impulsado por el Ministerio de Sanidad español.
En opinión de los médicos españoles esta ley representa una oportunidad para “impulsar la divulgación social de los cuidados paliativos y de la solidaridad con el que sufre”, porque “los cuidados paliativos no pueden considerarse como un privilegio sino como un derecho de todos los ciudadanos”.
Entre las doce recomendaciones que hacen estas dos organizaciones médicas figura que esta norma legal se denomine “Ley de calidad en la atención al final de la vida”, ya que “los términos inicialmente empleados (‘muerte digna’ y ‘morir con dignidad’) tienen significados diversos y a veces contrapuestos, lo cual puede inducir a confusión”. De hecho, organizaciones pro eutanasia los utilizan para justificar la anticipación provocada de la muerte.
Al ser un derecho de todos, mantiene que la ley “debe contemplar que los niños y los adultos con enfermedades no oncológicas accedan a la medicina paliativa en las mismas condiciones que los pacientes con cáncer”.
También piden que “se garantice el acceso equitativo a unos cuidados paliativos de calidad en todas las Comunidades Autónomas”, ya que actualmente hay mucha disparidad de recursos. Igualmente recomiendan “la creación de equipos de profesionales con formación avanzada y un perfil específico para esta atención”.
Los médicos dan a entender que la nueva ley no debería significar un cambio en las normas deontológicas de la medicina. Por ello defienden que “la nueva ley debe promover el respeto de la buena práctica médica y de los códigos de deontología de las profesiones sanitarias”.