Según los Centros para el Control y Prevención de las Enfermedades (CDC), de Estados Unidos, el país padece una epidemia de kilos. En 2010, clasificaron con sobrepeso u obesidad al 74% de los hombres y al 65% de las mujeres.
Pero si uno de sus propósitos para el año nuevo es adelgazar, espere un poco. Un estudio publicado por el Journal of the American Medical Association, indica que un moderado sobrepeso puede ser incluso beneficioso para la salud. El trabajo es un metanálisis de investigaciones que contemplan entre todas 2,88 millones de adultos y más de 270.000 defunciones. Las personas estudiadas proceden de países de los cinco continentes, catalogadas según el índice de masa corporal (IMC: peso en kilogramos dividido por el cuadrado de la altura en metros).
Los resultados muestran que las personas con sobrepeso u obesidad de grado 1 tienen un 5-6% menos de riesgo de muerte que las de peso normal. En cambio, la obesidad de grado 2 o 3 aumenta el riesgo un 29%. La tabla siguiente muestra los resultados; a título de ejemplo incluye los rangos de peso en kg de un adulto (20-60 años), hombre o mujer, de 1,75 m de estatura, que corresponden a los distintos IMC.
Peso normal | Sobrepeso | Obesidad grado 1 |
Obesidad grados 2-3 |
|
IMC | 18,5-25 | 25-30 | 30-35 | >35 |
Peso en kg de un adulto de 1,75 m |
56,5-76,5 | 76,5-92 | 92-107 | >107 |
Riesgo relativo de muerte (%) |
0 | –6 | –5 | +29 |
El menor riesgo para las personas con sobrepeso u obesidad moderada puede deberse a que tener más reservas hace menos frecuentes y graves otras enfermedades, en especial si uno es de edad avanzada. También es posible que la preocupación por el sobrepeso lleve a visitar más al médico y, por tanto, a prevenir trastornos.
Los autores del estudio concluyen que el IMC es una medida imperfecta de la mortalidad. Es preciso tener en cuenta otros factores como la presión arterial, el colesterol o la diabetes. Por tanto, si uno tiene sobrepeso pero no presenta otras señales de riesgo, como un elevado nivel de colesterol, no tiene por qué ponerse a dieta para adelgazar, dice el Dr. Steven Heymsfield, autor de un comentario editorial con que el JAMA acompaña la publicación del estudio.
La Dra. Katherine Flegal, coordinadora de la investigación, científica de los CDC, afirma que “el mejor peso posible para cada uno depende de su situación”. Para una persona mayor, lo que hoy se considera sobrepeso puede ser un peso óptimo. En efecto, los mayores de 65 años con obesidad de grado 2 no presentan mayor riesgo de mortalidad. Los autores, en fin, proponen revisar los límites comúnmente aceptados del peso normal, que parecen demasiado bajos.
Según dice en un artículo del New York Times Paul Campos, profesor de Derecho en la Universidad de Colorado y autor del libro The Obesity Myth: Why America’s Obsession With Weight Is Hazardous to Your Health, se ha llegado a una situación absurda, que el nuevo estudio deja en evidencia. Se ha afirmado que al menos 130 millones de estadounidenses –y muchos más millones en el resto del mundo– eran personas que necesitaban “tratamiento” por su sobrepeso. Esto sirvió para que engordaran los intereses económicos de algunas industrias y grandes empresas farmacéuticas, que producían medicamentos contra un “trastorno” que, en muchos casos, no es tal e incluso resulta saludable. Se hicieron conclusiones antes de confirmar la legitimidad de una obsesión cultural, y para promover los intereses económicos de los que se beneficiaron de esa obsesión.