Once de los mayores fabricantes de alimentos y bebidas que operan en Europa han pactado restringir voluntariamente la publicidad de sus productos en soportes dirigidos a niños. En el comunicado conjunto, fechado el 11 de diciembre, que da a conocer la iniciativa, dicen además que colaborarán con las autoridades para promover hábitos alimentarios más sanos en la población infantil. El acuerdo, que responde a peticiones de la Comisión Europea, comenzará a aplicarse a finales del año próximo en el ámbito de la Unión.
Las multinacionales firmantes se comprometen a no anunciar alimentos ni bebidas en programas de televisión, sitios de Internet o publicaciones impresas para menores de 12 años. Se exceptúan los productos que cumplan los criterios nutricionales oficialmente recomendados para niños de esas edades. Además, esas compañías no participarán en campañas informativas relacionadas con alimentos y bebidas que puedan llevarse a cabo en escuelas primarias, a no ser a petición de la autoridad escolar o de acuerdo con ella. Las campañas de este tipo, aunque tienen un componente educativo, son instrumentos de promoción comercial que estimulan el consumo de los productos mencionados en ellas.
Las empresas que han suscrito el pacto son: Burger King, Coca-Cola, Danone, Ferrero, General Mills, Kellogg, Kraft, Mars, Nestlé, PepsiCo y Unilever. Como se ve, son fabricantes de productos alimentarios muy famosos y apreciados entre el público infantil… y el adulto. De hecho, entre todas representan más o menos dos tercios del gasto total en publicidad de alimentos y bebidas en la UE.
Con esta medida de autorregulación esperan contribuir a que se reduzca la obesidad entre los niños, que es motivo de preocupación para padres y autoridades sanitarias.
Un sitio específico de Internet, pagado por las propias empresas firmantes, difundirá la existencia y el contenido del acuerdo durante el año que falta hasta la entrada en vigor.