Sufrirán menos las grandes instituciones y las que han sabido diversificar sus fuentes de financiación
Después de años en que las arcas estatales financiaron con generosidad multitud de proyectos culturales en el Reino Unido, los rigores de la crisis económica han alcanzado también a las artes. Los recortes del gasto público emprendidos por el gobierno conservador-liberal para reducir el déficit han llegado también al Arts Council England (ACE), que financia los organismos culturales del país, y que ha sufrido un tijeretazo del 15% en su presupuesto (100 millones de libras menos),
A primeros de abril, los responsables de compañías de teatro o de danza, galerías de arte y museos, esperaban ansiosos las noticias del ACE, del que dependía en buena parte su futuro.
Finalmente, de las 1.300 entidades que habían solicitado la ayuda pública, solo 695 obtendrán financiación para el periodo 2012-2015. En lugar de un recorte generalizado, el ACE ha preferido ser más selectivo en su ayuda, que antes llegaba a 848 instituciones, y tomar decisiones caso por caso. Incluso hay grupos cuyo éxito ha sido premiado por el ACE con un aumento de la subvención.
Salen mejor paradas las grandes instituciones. La Royal Shakespeare Company, la Royal Opera House o el English National Ballet verán reducidas sus subvenciones en un 6,6%. Con este recorte moderado se ha querido reconocer el esfuerzo de las instituciones que han sabido diversificar sus fuentes de financiación, para depender menos del apoyo público. Por ejemplo, el presupuesto del National Theatre solo depende en un 30% de los fondos públicos.
Los museos nacionales, como el British Museum y la National Gallery, que son financiados directamente por el Ministerio de Cultura, perderán un 15% de su subvención. El acceso a las colecciones permanentes seguirá siendo gratuito, mientras que las exposiciones temporales continuarán siendo de pago. Así que lo más probable es que en el futuro haya más exposiciones temporales, que suelen ser caras.
Peor pronóstico tienen las instituciones pequeñas, del tipo de teatros municipales, museos locales, festivales regionales… Pues, además de perder en todo o en parte la financiación del ACE, su presupuesto depende también mucho de los municipios. Estos también sufren el rigor presupuestario y, puestos a cortar, reducirán antes el gasto en cultura que en los servicios sociales. El ministro de Cultura, Jeremy Hunt, ha pedido a las autoridades locales que “reconozcan la importancia crucial de las artes, tanto a nivel económico, como cultural y social”.
El gobierno ha decidido también aumentar la parte que se dedica al ACE de los ingresos de la Lotería Nacional. El año pasado, recibió 149 millones de libras de la Lotería Nacional, y se prevé que esta aportación suba hasta 223 millones en 2014-2015.
En cualquier caso, el sector cultural va a tener que ingeniárselas para diversificar sus fuentes de financiación, y recurrir directamente a la sociedad civil y no solo al Estado.