El cierre de escuelas católicas en algunas zonas urbanas de Estados Unidos ha llevado a dos profesoras de la Universidad de Notre Dame a preguntarse qué ocurre con los barrios que se quedan sin colegio católico. La conclusión de Margaret Brining y Nicole Stelle Garnett en su libro Lost Classroom, Lost Community (1) es que allí donde cierran, disminuye la cohesión social y aumenta la delincuencia.
Una versión de este artículo se publicó en el servicio impreso 68/14
El prestigio de las escuelas católicas en los barrios pobres de EE.UU. está bien documentado (cfr. Aceprensa, 24-05-2010). Por eso, este libro no pretende abundar más en los efectos que tienen estos colegios en los estudiantes. Lo que interesa a Brining y Garnett, especialistas …
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