En el Reino Unido, unos padres han logrado que el colegio de sus hijos ofrezca una alternativa de su gusto a los alumnos que no quieren participar en actos religiosos. Esta acomodación por parte de la escuela a las convicciones de esos padres es la misma que reclaman para sus hijos otros progenitores ante enseñanzas que contradicen su visión de la familia y la sexualidad.
Burford Primary School, en Oxfordshire, es una escuela pública gestionada por una entidad no estatal, una fórmula que incentivó el gobierno laborista de Tony Blair y que reforzó la coalición entre conservadores y liberaldemócratas liderada por David Cameron.
Lee y Lizanne Harris, que son ateos, matricularon a sus dos hijos en Burford Primary School, el único colegio públic…
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