Se aplaza en Francia el debate de la ley sobre ayudas para inversiones de la enseñanza privada
El ministro de Educación francés, François Bayrou, ha anunciado el aplazamiento del debate del proyecto de ley que permitiría a las administraciones locales financiar libremente las inversiones de las escuelas privadas. La ley había sido ya aprobada por la Asamblea Nacional (cfr. servicio 94/93) y debía ser discutida en el Senado en la sesión parlamentaria de otoño. El ministro ha justificado el aplazamiento por la preocupación de evitar que la escuela «vuelva a estar en el centro de un choque ideológico».
El proyecto pretende cambiar las disposiciones de la ley Falloux de 1850, según la cual las ayudas con fondos públicos para esas inversiones escolares no pueden superar el 10%. Por otra parte, los centros privados que han suscrito un contrato de asociación con el Estado cubren sus gastos de funcionamiento con fondos públicos.
Para examinar el asunto con más serenidad, se creará una comisión de estudio, dirigida por un personaje neutral -Georges Vedel, antiguo miembro del Consejo Constitucional-. Su misión será, fundamentalmente, ilustrar a la opinión pública sobre tres cuestiones: cómo se aplica la ley actual, cuál es el estado de las construcciones escolares privadas y públicas y cuánto costaría ponerlas en condiciones.
La decisión del gobierno ha suscitado diversas interpretaciones encontradas. Para unos, se trata de aplazar sine die un proyecto que corre el riesgo de resucitar la guerra escolar y con el que la izquierda podría desgastar al gobierno a golpe de manifestaciones y protestas. Para otros, por el contrario, se trata de una simple tregua, sin que signifique de ningún modo renunciar a la revisión de la ley Falloux.