El exceso de celo de la administración pública puede destrozar la infancia de un niño y hacerle pagar lo que en la National Coalition For Child Potection Reform (NCCPR), de Estados Unidos, llaman “el precio del pánico”. Es lo que le ocurrió a Krinna Patel, que nació en Tampa (Florida), cuando su madre, de nacionalidad india, visitaba a unos amigos. Nada más nacer, Krinna fue “confiscada” durante dos meses por el Departamento de Menores de Florida (DCF) porque su madre, que apenas hablaba inglés, no comprendió adecuadamente a un funcionario que le preguntó si tenía casa e ingresos. Ella contestó que no porque estaba de visita y su respuesta bastó para quitarle temporalmente la tutela de su hija.
El drama de Krinna ocurrió en Florida en 199…
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