La atención mediática suscitada por la posible revocación de Roe v. Wade, la sentencia de 1973 que legalizó el aborto en todo Estados Unidos, ya ha tenido un efecto beneficioso: el replanteamiento de la raquítica política familiar del país, cuyo nivel de protección social anda muy por debajo de la que ofrece el Estado del bienestar europeo.
En el debate sobre el aborto, se esgrimen argumentos de diversa índole: científicos, filosóficos, morales, médicos, legales... Pero una cosa son las grandes razones de quienes toman la palabra en la conversación pública, y otra los motivos concretos que conducen a cada aborto.
En este sentido, es revelador el testimonio de la ginecóloga Christine Henneberg, que lleva doce años practicando abortos. Aunque…
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