Intenso drama protagonizado por unos sacerdotes que trabajan en un barrio marginal bonaerense. No es una cinta redonda pero evita los tópicos simplistas.
Crisis y despidos en unos astilleros de Marsella. Con postulados más humanistas que socialistas, la película hable de amor al prójimo, comprensión y perdón.
Inteligente película que esquiva el biopic convencional para ofrecer un pequeño ensayo trágico sobre el cine y la vida, encarnado en un mítico juguete roto.