Sascha Hartmann

Sin efectismos y con tono sereno se describen los esfuerzos de un fiscal alemán que en 1958 intenta llevar a juicio a culpables de atrocidades cometidas en Auschwitz.

Contenido exclusivo para suscriptores de Aceprensa

Estás intentando acceder a una funcionalidad premium.

Si ya eres suscriptor conéctate a tu cuenta. Si aún no lo eres, disfruta de esta y otras ventajas suscribiéndote a Aceprensa.