La foto de un hombre comulgando ocupa media página del periódico (El Mundo, 16-01-2011). El titular reza: “La comunión de Txelis, el ex jefe de ETA”. El subtítulo recuerda que “es un ex etarra durante cuyo liderazgo hubo 200 asesinatos. Hoy predica la paz”.
Fotografiar a una persona comulgando, si ha sido sin su consentimiento, es una invasión de la privacidad. Pero esa intromisión saca en este caso a la luz pública uno de esos cambios positivos que la fe provoca en las personas, y que suelen quedar en el ámbito de la intimidad o del círculo de familiares y amigos.
José Luis Álvarez Santacristina, Txelis, 57 años, ha recorrido un largo camino: de seminarista a etarra para convertirse después en terrorista arrepentido. Según recuerda el rep…
Contenido para suscriptores
Suscríbete a Aceprensa o inicia sesión para continuar leyendo el artículo.
Léelo accediendo durante 15 días gratis a Aceprensa.