Aunque no es uno de los temas claves, en la ley de reforma laboral recién aprobada en Francia se ha añadido una disposición que autoriza a las empresas a incluir en su reglamento de régimen interior un “principio de neutralidad” que, en ciertos casos, puede impedir “la manifestación de las convicciones de los asalariados”. No se especifica qué tipo de convicciones, pero en la laica Francia se entiende que se apunta a las convicciones religiosas.
La enmienda fue propuesta por la senadora Françoise Laborde, que parece mantener una personal cruzada laica en este tema. Ya en 2012 había presentado, sin éxito, una proposición de ley que pedía “extender la obligación de neutralidad a las estructuras privadas que se ocupan de la atención a la infan…
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