Decenas de mujeres encapuchadas intentaron, a finales de septiembre, incendiar la Catedral Metropolitana de México. Habían participado en una marcha para reclamar la instauración del aborto a petición y no idearon mejor modo de concluir que tratar de prenderle fuego al templo. Afortunadamente, los seis conatos de incendio fueron controlados.
Días después, en Argentina, idéntica situación: acababa el Encuentro Nacional de Mujeres en la ciudad de La Plata, y varias participantes de la manifestación se desviaron hacia la catedral local. El cordón policial, en el que por cierto había agentes femeninas, evitó que ingresaran en el edificio, a pesar de lo cual, algunas de las furiosas activistas prendieron fuego a trozos de madera y los lanzaron c…
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