La Santa Sede ha levantado la excomunión al teólogo cingalés Tissa Balasuriya como consecuencia de su aceptación y lectura pública de la profesión de fe. El acto se celebró el pasado 15 de enero en presencia del arzobispo de Colombo (Sri Lanka), del nuncio y del superior general de los Oblatos de María Inmaculada, congregación a la que pertenece el padre Balasuriya.
La excomunión del teólogo se produjo en enero de 1997, después de años de conflicto, cuando el autor no reconoció los graves errores que habían sido señalados por la Congregación para la Doctrina de la Fe (ver servicio 8/97). Los errores iban mucho más allá de su apoyo al sacerdocio femenino, como se presentó en la prensa. En su obra Mary and Human Liberation, Balasuriya niega verdades centrales de la fe como el carácter sobrenatural de la creación, que Cristo sea hijo de Dios, el pecado original, la necesidad del bautismo, la virginidad de María y su asunción al cielo.
En la ceremonia, el padre Balasuriya presentó al obispo de Colombo una declaración de reconciliación en que lamenta el daño causado por su libro y por los acontecimientos posteriores. También expresa su fe católica y reconoce la autoridad del Magisterio ejercida tanto a nivel local como universal con respecto a sus escritos. Y señala que en el futuro accede a someter sus escritos relativos a la fe y a la moral al imprimatur de los ordinarios diocesano y religioso.
A pesar de la excomunión, el hecho de que ésta haya sido levantada muestra que el diálogo entre el teólogo y la Congregación para la Doctrina de la Fe ha proseguido durante todo este año.