Ser americano y musulmán al mismo tiempo no es fácil de llevar en Estados Unidos. Especialmente desde que se propusiera construir una mezquita en la Zona Cero. La aprobación municipal para edificar un centro cultural islámico a cuatro manzanas del extinto World Trade Center ha causado un gran revuelo en la ciudad de Nueva York.
Unos aseguran verlo como una señal de la tolerancia y la libertad religiosa que caracteriza a la sociedad neoyorquina y, por extensión, a la americana; otros la interpretan como un paso adelante del Islam por imponerse a las demás religiones y gobernar el mundo; y los últimos creen que supone una infamia contra el recuerdo de todas aquellas personas que murieron en el atentado del 11-S, incluso algunos destacados mus…
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