La agresiva hostilidad mostrada por ciertos grupos ante la visita de Benedicto XVI al Reino Unido (16-19 septiembre 2010) ha provocado que algunos ateos británicos se planteen adoptar un tono más respetuoso en sus críticas. La idea podría resumirse así: Si vamos a discrepar con los católicos, al menos hagámoslo con cortesía y sin tergiversar sus posturas.
El estilo visceral de los llamados “nuevos ateos” (cfr. Aceprensa, 28-07-2010) ha terminado por sonrojar a los ateos que se limitan a negar la existencia de Dios. E incluso a los que, desde posiciones más combativas, promueven el ateísmo pero sin caer en las estridencias de Richard Dawkins y compañía.
Paul Sims, redactor jefe de la revista New Humanist, es uno de los ateos que ha escrito a…
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