El periodista Francesco Ognibene entrevista al prelado del Opus Dei, Mons. Fernando Ocáriz, para el diario italiano Avvenire. Recogemos las respuestas sobre el comportamiento en las redes sociales y la exhortación apostólica Gaudete et exsultate.
“¿Qué significa hoy para un laico buscar la santidad en la sociedad digital?”, pregunta Ognibene.
“Entre otras cosas –responde Mons. Ocáriz–, significa sembrar de amistad el mundo digital, superando así el riesgo de la despersonalización”. Pues “las relaciones auténticas comienzan cuando se ven personas concretas en el centro de toda interacción, aunque a menudo, en las conversaciones digitales, no se las tenga delante”.
También significa “compartir contenidos valiosos, sin sustituir la cultura por mera información”. “Y para eso hace falta estudiar, reflexionar, orar, escuchar. Además, los cristianos hemos de infundir serenidad en el rápido flujo digital”. Por último, Mons. Ocáriz destaca la necesidad de “vivir con coherencia, en unidad de vida, sin duplicidades: no se puede pretender ser ciudadano modelo y buen cristiano offline y después actuar online sin freno, sin caridad ni buen juicio en los modos”.
Sobre el magisterio de Francisco, Mons. Ocáriz señala: “El Papa enseña a todos lo mismo: vivir el Evangelio, procurar salir hacia las periferias humanas que a veces pueden asustar, pero donde el Señor nos pide estar presentes. Su ejemplo está llevando a tantos católicos, entre ellos muchos fieles del Opus Dei, a poner en práctica iniciativas de acogida a inmigrantes y refugiados, o tantas otras actividades de apostolado en ambientes difíciles, para acercar el Evangelio a los no creyentes”.
Ognibene pide a Mons. Ocáriz sus impresiones sobre la reciente exhortación de Francisco, Gaudete et exsultate, sobre la vocación de todos los cristianos a ser santos, que es el núcleo del mensaje del Opus Dei. “Cuando leí Gaudete et exsultate pensé enseguida en la alegría que habría experimentado san Josemaría viendo esta nueva expresión del mensaje de la llamada universal a la santidad en las palabras del papa Francisco”. De la exhortación, el prelado subraya en especial que “nos presenta las bienaventuranzas como el carné de identidad de quien busca la santidad en la vida cotidiana”. Es este “un camino –prosigue Mons. Ocáriz– que a veces exige andar a contracorriente, pero que al final, es bienaventuranza, o sea felicidad”.
El prelado del Opus Dei se fija en otro detalle de la exhortación: la insistencia en “fundamentar la santidad en pequeños gestos”. Eso es algo, dice, “muy característico de san Josemaría, que en su libro Camino escribió: ‘¿No has visto en qué pequeñeces está el amor humano? —Pues también en pequeñeces está el Amor divino’ [n. 824]”.