Earwig y la bruja es una historia de Diana Wynne Jones, autora de otra novela adaptada al cine por Hayao Miyazaki, El castillo ambulante. Trata de una huérfana de 10 años que tiene el don de engatusar a las personas a su alrededor, controla el orfanato y le encanta vivir ahí. Pero un día una extraña pareja, en realidad una bruja y un hechicero, no se deja seducir y la adopta. Fuera de su ambiente intenta, sin éxito, controlar a sus padres adoptivos, a los que conquistará simplemente por su ingenio y corazón.
Earwig y la bruja tiene unos personajes interesantes, algunos encantadores; la animación y los fondos son muy buenos; pero la narración es pobre, le falta conflicto, y los personajes evolucionan poco, no provocan esa simpatía arrebatadora que siempre ha conseguido el estudio Ghibli. Hay destellos interesantes, gestos sugerentes de esa riqueza interior que Goro Miyazaki busca transmitir; pero él no es su padre.