Director: Frank Oz. Intérpretes: Steve Martin, Goldie Hawn, Dana Delany.
Frank Oz se encuentra a gusto en el terreno de la comedia: allí ha cosechado algunos éxitos, como La tienda de los horrores, Un par de seductores o ¿Qué pasa con Bob?. Esta vez cuenta con Steve Martin en el papel de Davis, un arquitecto al que su novia Becky acaba de dar calabazas. En plena crisis conoce a una camarera llamada Gwen. Pasa la noche con ella, con la idea de no volverla a ver después. Pero, aprovechando la ausencia de Davis, ella ocupa la casa que éste había construído para Becky y se hace pasar por mujer del arquitecto. Al llegar al pueblo, Davis continúa la farsa.
La historia, escrita por el debutante Mark Stein, es la clásica de enredo, urdida en torno a una mentira, que va dando lugar a embustes sucesivos, hasta hacer las cosas muy complicadas. Así, se producen numerosas situaciones divertidas, provocadas por una buena galería de personajes secundarios.
Ante la escasez actual de buenas comedias, y el recurso fácil a la sal gruesa, Esposa por sorpresa constituye una película grata. No es redonda, contiene algún detalle frívolo… pero intenta rescatar el espíritu de las comedias de antaño.
José María Aresté