Director: David O. Russell. Guión: David O. Russell, Jeff Baena. Intérpretes: Dustin Hoffman, Isabelle Huppert, Jude Law, Jason Schwartzman, Lily Tomlin, Mark Wahlberg, Naomi Watts, Kevin Dunn, Ger Duany. Adultos. (XSD)
Esta película de impresionante reparto e inteligente diseño de producción se inscribe en el subgénero del melodrama estrambótico con pretensiones. Se trata de formar un vistoso ramillete con personajes aparentemente inconexos que el aparente azar se encargará de reunir. Cuarto largometraje del neoyorquino de 47 años David O. Russell («Tres Reyes»), que trata en clave de estilizada farsa existencial la absurda vida que se imponen muchas personas con tal de triunfar y dar una imagen de «modernidad progresista».
El director de la asociación ecologista Open Spaces; un ambicioso ejecutivo de los supermercados Huckabees y su novia, bellísima modelo imagen de Huckabees; un bombero obsesionado con la dependencia del petróleo tras el 11-S (magistral Wahlberg). Son piezas de un «puzzle» que armarán los Detectives existenciales (muy divertidos Hoffman y Tomlin), contratados por el ecologista en crisis de identidad para que le proporcionen la clave que le permita reencontrase consigo mismo y recuperar la autoestima perdida.
Ciertamente el embrollo argumental exige un plus de atención por parte del espectador acostumbrado a historias convencionales. Hay varias situaciones surrealistas verdaderamente divertidas. También una inexplicable secuencia de sexo y algunos diálogos groseros. Las interpretaciones son magníficas y, a pesar del caos delirante y del exceso de metraje, hay un claro mensaje a favor de la cordura de una vida sencilla. Con una adecuada poda podría haber sido una gran película.
Alberto Fijo