Walden Media da continuidad a su propuesta familiar con La isla de Nim, una exótica y dramática aventura, inspirada en la novela juvenil de Wendy Orr. La protagonista es Nim, una inteligente e imaginativa niña de ocho años, huérfana de madre y que vive con su padre -científico experto en plancton- en una paradisíaca isla del Pacífico, desconocida por todos. Los numerosos recursos de Nim son puestos a prueba cuando su padre se pierde en mitad del océano, a la vez que unos piratas inmobiliarios desembarcan en la isla con un ruidoso cargamento de turistas pesados.
Nim pedirá ayuda a su héroe favorito de ficción: el aventurero Álex Rover. Pero sólo encontrará respuesta de Alexandra Rover, la cobarde y neurótica autora de sus novelas, cuya accidentada aparición coincide con una espeluznante tormenta tropical.
La trama es original y divertida; el público juvenil y adolescente disfrutará con ella. Además, Abigail Breslin y Gerard Butler encarnan muy bien a sus personajes, y recrean con convicción sus conflictos dramáticos y morales. Más discutible es la interpretación de Jodie Foster, a la que cabe elogiar por sus esfuerzos para cambiar de registro, pero demasiado histriónica e histérica.
Por su parte, el matrimonio de guionistas y directores formado por Jennifer Flackett y Mark Levin sacan partido a los bellos parajes australianos donde han rodado, y se lucen en las secuencias con animales y animatronics. Pero el tono de su guión es demasiado infantil, y su puesta en escena resulta previsible y rutinaria. Así que el conjunto nunca tiene el vigor de las grandes películas familiares.