Hay películas que no son magistrales pero sí interesantes, amenas y bonitas. El último adjetivo le viene al pelo a la historia que el veterano Mike Newell ha rodado con mimo en bellas localizaciones de Devon, Bristol y Cornualles, además de contar con los siempre eficaces estudios londinenses de la Ealing. Se trataba de recrear la vida en la isla de Guernsey recién terminada la Segunda Guerra Mundial. No esperen 84 Charing Cross Road, que es un libro excelente y una película notable.
Como es sabido, Guernsey y Jersey, islas británicas del Canal frente a Normandía, estuvieron en poder de los alemanes desde junio de 1940 hasta mayo de 1945. Cinco años son muchos años…
La norteamericana Mary Ann Shaffer escribió una novela que no pudo culminar por su muerte y que terminó Annie Barrows. Un relato epistolar ingenioso y hábil desgrana el desvelamiento de un misterio en el que el amor a los libros tiene una gran importancia como manera de resistencia ante la ocupación nazi. Una joven y afamada novelista londinense viajará a Guernsey para conocer a los miembros de un variopinto club literario con los que ha intercambiado correspondencia y que la han invitado, recién acabada la Guerra, a participar como miembro de honor. Secretos muy bien guardados saldrán a relucir.
Hermosamente fotografiada y con un esmerado diseño de producción, la película cuenta con un estupendo reparto que capitanea la joven Lily James, que fue una conmovedora Natalia Rostova en la excelente miniserie Guerra y Paz de la BBC.