Director: Alan J. Pakula. Guión: Kevin Jarre. Intérpretes: Harrison Ford, Brad Pitt, Margaret Colin, Ruben Blades, Treat Williams. 112 min.
Rory, un terrorista del IRA, viaja a EE.UU. para comprar un cargamento de misiles Sting. Allí se aloja, bajo identidad supuesta, en el hogar de Tom, un honrado policía. Curiosamente, la línea argumental es el reverso de la de Donnie Brasco: el criminal convive con gente de bien y disfruta del placer de una vida tranquila.
La producción sufrió por el ego de los actores -los por otra parte magníficos Harrison Ford y Brad Pitt-, que exigieron cambios que realzaran sus personajes. Le ha tocado pagarlo al guión, en el que se aprecian algunas fisuras. El prólogo irlandés, magnífico, explica el porqué de la actividad terrorista de Rory; y, con pulso firme, Alan J. Pakula describe la vida diaria del policía, y el progresivo acercamiento a su huésped. Cuando Tom descubre quién duerme realmente bajo su techo, la historia se tuerce con situaciones increíbles, que conducen a un final insatisfactorio. Pese a todo, el film, apreciable, da un enfoque nuevo a la nutrida filmografía sobre el IRA. Es de justicia destacar la fotografía del maestro Gordon Willis y la inspirada partitura de aires celtas de James Horner.
José María Aresté