Director: Soren Kragh-Jacobsen.Intérpretes: Tomas Villum Jensen, Mortem Buch Jorgensen, Nikolaj Lie Kaas, Xenia Lach-Nielsen.
Esta película danesa se basa en hechos reales acaecidos durante el verano de 1942, en plena ocupación nazi de Dinamarca. Desoyendo la llamada a la colaboración del gobierno danés, un grupo de estudiantes de clase media-alta de la escuela de San Petri llevaron a cabo una serie de acciones contra los nazis. Al principio, fueron simples gamberradas, pero poco a poco se fueron implicando en verdaderos actos de sabotaje, sobre todo desde que admitieron en el grupo a un temerario joven de clase obrera.
La puesta en escena de Kragh-Jacobsen combina un ágil desarrollo con una sugestiva belleza formal y una intensa dirección de actores, llena de fuerza dramática. Esto se completa con una magnífica ambientación y con la vibrante banda sonora de Jacob Groth.
El film da excesiva primacía a las acciones bélicas de los muchachos, en detrimento del análisis de los dilemas morales a los que se enfrentaron. De ahí que su encendida parábola sobre la lucha contra la tiranía resulte un poco insustancial. Le pasa lo que a otra película reciente de similares planteamientos: Rebeldes del swing, de Thomas Carter. Y, desde luego, resulta más superficial que Adiós, muchachos, de Louis Malle, El reencuentro del amigo, de Jerry Schatzberg, o Europa, Europa, de Agnieszka Holland. En todo caso, es un film entretenido y más que digno, con muchos puntos de interés.
Jerónimo José Martín