Para romper la rutina de su vida matrimonial, Phil y Clara Foster deciden salir a cenar y a divertirse. La noche loca empezará cuando una banda de mafiosos confunda al tranquilo matrimonio con una pareja de peligrosos e inteligentes delincuentes.
El arranque de esta alocada comedia es prometedor: un divertido equívoco, un ritmo vertiginoso, unos jugosos diálogos y dos actores -Steve Carell y Tina Fey- solventes, ¿qué más se puede pedir a una comedia? Pues que mantenga el diálogo, el tono y el ritmo los escasos 90 minutos que dura. Y aquí naufraga la cinta. A partir de la media hora, la película se empantana, pierde fuelle, se hace repetitiva y, para tratar de evitar el aburrimiento, abandona el tono de divertimento loco para descarriar por …
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