Director y guionista: Jorge Gaggero. Intérpretes: Norma Aleandro, Norma Argentina, Marcos Mundstock, Raúl Panguinao, Elsa Berenguer, Susana Lanteri, Claudia Lapacó. 87 min. Jóvenes-adultos. (SD)
En forma de comedia o de drama, las difíciles circunstancias económicas por las que atraviesa Argentina suscitan películas sobre los efectos de las crisis. Crisis de madurez, crisis de identidad, crisis matrimoniales, crisis políticas… Gaggero, 34 años, analiza en esta su «opera prima» -premio especial del Jurado en Sundance- las consecuencias que la debacle económica tiene en la relación entre Beba, una dama de la alta burguesía porteña venida a menos, y su empleada doméstica, Dora. Después de 30 años al servicio de su señora, y por culpa de la ruina de ésta, Dora se plantea cambiar de trabajo.
Por encima de lo más convencional, la cinta profundiza en una relación nada habitual en el cine; la de dos mujeres íntimamente unidas a pesar de su situación de desigualdad social y laboral. Frente a la tendencia a la locuacidad del cine argentino, el silencio es el tercer protagonista de «Señora Beba». Son silencios especialmente elocuentes los de Dora; gestos de cariño, de comprensión y compasión ante el hundimiento de su señora. Silencios alternados por breves diálogos que dejan entrever el valor humano de una profesión a veces poco valorada.
No obstante sus escasos 90 minutos, la película se hace algo lenta, quizás por la ausencia de tramas secundarias. Todo se condensa en una única acción y en cuatro o cinco escenarios. A favor tiene un excelente dúo protagonista; a la siempre eficaz Norma Aleandro se suma como revelación la debutante Norma Argentina, que ha aportado al papel de Dora su experiencia como empleada doméstica durante muchos años.
Ana Sánchez de la Nieta